Las Vegas se ha convertido en la primera gran urbe de Estados Unidos en utilizar electricidad solo de origen renovable en todos sus edificios e infraestructuras públicas, fundamentalmente gracias a los 100 megavatios aportados por la planta fotovoltaica Boudel Solar I, localizada al sur del Estado de Nevada. A finales de 2017, la presa de Hoover también suministrará energía hidroeléctrica a la región.
Las Vegas inició en 2008 su andadura hacia la energía 100% renovable. Desde entonces, la ciudad se ha ido llenando de sistemas solares situados en edificios, parques, o sobre tejados industriales (como la planta de tratamiento de aguas residuales), de manera que toda la infraestructura pública, desde los edificios de gobierno hasta las luces en las calles, ya se abastecen de electricidad producida de manera renovable.
Así, a fecha de hoy, un total de 140 instalaciones proporcionan energía limpia y verde a la ciudad, según informa Las Vegas Review-Journal. Se estima que gracias a ello, el Ayuntamiento se está ahorrando en torno a cinco millones de dólares cada año.
Con la finalización del gran proyecto Boulder Solar I, construido mediante una alianza con NVEnergy –compañía eléctrica con la que el Ayuntamiento suscribió un acuerdo hace un año–, la alcaldesa de Las Vegas, Carolyn Goodman, pudo anunciar hace una semana que la meta de usar solo electricidad renovable había sido ya alcanzada. La instalación, de 100 MW, se encuentra en el Valle de Eldorado (sur de Nevada), junto con la planta solar Boulder II, de 50 MW.
La ciudad de los casinos, cuya áarea metropolitana ronda los dos millones de habitantes, cuenta también con instalaciones geotermales y a partir de finales de 2017 empezará a recibir energía de la central hidroeléctrica Hoover Dam, que complementará las fuentes renovables existentes.
El éxito de esta ciudad podría empujar a otras, como San Francisco o San José, que se han comprometido a producir el 100% de su energía en forma renovable para 2035, a tratar de alcanzar su meta con mayor rapidez.