El Gobierno de Nicaragua hizo su resolución de año nuevo para el 2016: lograr en los próximos cuatro años que 90% de la energía que consumen provenga de fuentes renovables.
A través de alianzas del sector público y privado y con el apoyo de la Empresa Nicaragüense Alemana y Canadian Solar se planea aumentar la explotación de fuentes naturales y poco contaminantes de energía, llegando a la meta de 90% en 2020.
La principal fuente de electricidad de la nación centroamericana es la energía solar. Diversas zonas rurales del país cuentan con paneles solares y plantas operadas por los mismos habitantes, las cuales les permiten no depender de un sistema central.
Igualmente, se han inaugurado varias plantas eléctricas a lo largo del país que dependen exclusivamente de la energía solar.
Instituciones como universidades y hospitales están invirtiendo en la instalación de paneles solares para volverse más autónomos en términos de energía, lo cual es ampliamente incentivado por el gobierno.
La nación también trabaja en una alianza con la Unión Europea para que los nicaragüenses puedan acceder a la educación técnica necesaria para instalar y operar este tipo de plantas e instalaciones de manera autónoma.
Más de 4 mil millones de dólares serán invertidos en los próximos 15 años para concretar este proyecto.