La energía eléctrica generada por los propios consumidores se puede acumular almacenándola en baterías propias, para su consumo posterior, o bien, en un futuro, utilizando la red eléctrica externa.
Un kit fotovoltaico de autoconsumo es una forma de ahorrar en la factura eléctrica a la vez que contribuimos a un mundo más sostenible al utilizar una energía limpia y renovable como es la energía solar.
¿Cómo funciona el Kit Fotovoltaico de Autoconsumo?
El funcionamiento de un kit fotovoltaico de autoconsumo es muy sencillo. Los rayos del sol envían unas partículas llenas de energía llamadas fotones. Estos, al chocar con las placas solares fotovoltaicas producen una diferencia de potencial que genera una corriente continua.
Para los electrodomésticos de nuestras casas necesitamos corriente alterna, que es la que se compra a las compañías eléctricas, por lo que mediante un inversor o convertidor se transforma la corriente continua en corriente alterna. El inversor simplemente se conecta a un enchufe de la vivienda.
Cuando instalamos un kit fotovoltaico de autoconsumo los primeros W que consumimos en nuestro hogar vienen de nuestro kit y no de la red general. Solo lo que nos falte se ha de comprar a la compañía eléctrica. En realidad, se trata de un electrodoméstico que no consume energía sino que la produce.
¿Qué potencia puede ofrecerme un Kit de Autoconsumo?
La potencia del kit fotovoltaico de autoconsumo debe ser como mínimo la necesaria para cubrir los electrodomésticos de consumo permanente de la vivienda. Se puede medir lo que se consume de forma habitual y en función de las necesidades mínimas, instalar el equipo más adecuado y con suficiente potencia.
¿Por qué ahorro con un kit de autoconsumo?
Los kits de autoconsumo son, además de una inversión claramente rentable, un producto de ahorro. Al generar nuestra propia energía compramos menos electricidad a la red externa. Esto supondráun ahorro considerable en la factura de la compañía eléctrica por lo que desde el principio empezaremos a rentabilizar nuestra inversión. Los kits fotovoltaicos de autoconsumo se amortizan en poco tiempo y a partir de ahí se produce energía propia con coste cero.
Ejemplo de cálculo de ahorro de energía:
Se ha calculado que el coste medio de la electricidad que genera un sistema de autoconsumo al cabo de 10 años será entre un 30 y un 40% más barata que si se compra a la compañía eléctrica. A esto tendríamos que añadir un 10% más de ahorro, porque al no transportarse la energía por las redes de distribución se producen menos pérdidas.
Un hogar de tamaño medio que tenga un sistema de energía solar con posibilidad de almacenamiento y paneles de tamaño adecuado, solo tendría que recurrir a a la electricidad de la red externa algunas horas por semana.
Si la energía producida por el kit solar en un año, que es la que dejamos de consumir de la red eléctrica, la multiplicamos por el precio del kWh en nuestra provincia, nos da como resultado lo que nos ahorramos en la factura de la luz en ese año.
Hay que tener en cuenta además, que cuanto más al sur nos encontremos, más horas de sol tenemos, por lo que nuestra producción propia de energía será mayor, aunque en España en todas partes se disfruta de horas de sol suficientes para que la instalación de sistemas de energía solar resulten idóneos.
Venta de energía eléctrica
Por otro lado, en breve, se podrá vender a la red el exceso de energía eléctrica que no se consume en períodos de ausencia del domicilio o en meses que, por la razón que sea, gastamos menos energía. Actualmente para poder inyectar la producción a la red, y cobrar por ello.
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