El material de estas luces planas se ha construido basándose en una pantalla de fósforo y una sola pared de nanotubos de carbono altamente cristalinos.
Los creadores de las luces LED azules recibieron el Premio Nobel de Física 2014 por tan innovadora invención. Ahora, parece que les ha salido un duro competidor con un tipo de luz plana que supera a los clásicos LEDs, ya tan extendidos en nuestra sociedad. El trabajo ha sido publicado en la revista Review of Scientific Instruments.
Los artífices de este nuevo invento son un equipo de científicos de la Universidad de Tohoku (Japón). El punto clave de las luces planas es que están formadas por nanotubos de carbono que tienen una alta eficiencia energética y muy bajo consumo de energía: alrededor de 0,1 vatios por cada hora de funcionamiento, unas 100 veces menos que las luces LED.
Según la investigación, el material de estas luces planas se ha construido basándose en una pantalla de fósforo y una sola pared de nanotubos de carbono altamente cristalinos. Luego, ensamblaron el dispositivo con una mezcla líquida de un disolvente orgánico combinado con un producto químico muy parecido al jabón, conocido como agente tensioactivo. Esa mezcla se coloca sobre cada electrodo positivo o cátodo; se rasca la superficie con papel de lija y finalmente se obtiene un panel de luz, la luz plana.
Este material podría permitir la creación de nuevos dispositivos brillantes, de bajo coste y baja potencia, que harían tambalear el dominio de las luces LED. “Nuestro sencillo panel de podría obtener una alta eficiencia de luminosidad, de 60 lúmenes por vatio, lo que supone un excelente potencial para un dispositivo de iluminación con bajo consumo de energía”, afirma Norihiro Shimoi, líder del estudio.